El nuevo jefe de gabinete de Sánchez redactó el informe de la ‘España 2050’ que aconseja no comer carne

Diego Rubio, el nuevo jefe de Gabinete de Pedro Sánchez, es el responsable del informe Plan España 2050 en el que el Ejecutivo pedía a los españoles reducir el consumo de carne y los desplazamientos. Dicho documento, según el propio equipo redactor, «es un ejercicio de prospectiva estratégica que persigue un doble objetivo: mejorar nuestra comprensión de los desafíos y las oportunidades sociales, económicas y medioambientales que afrontará nuestro país en las próximas décadas y generar, a partir de un diálogo multiactor, una Estrategia Nacional de Largo Plazo, que nos permita fijar prioridades, coordinar esfuerzos y garantizar la prosperidad y el bienestar de nuestra ciudadanía en el futuro».

A lo largo de las 676 páginas de su Plan España 2050, el Gobierno, con la firma de Diego Rubio, desgrana las propuestas que considera imprescindibles para la transformación del país. El documento con las líneas maestras de la política del mandatario socialista para las próximas décadas, aboga con claridad por reducir el consumo de carne, aludiendo a que la actual situación es insostenible para la conservación del planeta.

En el informe se critican con dureza las costumbres de la sociedad española, destacando que «numerosos estudios señalan que el consumo de carne de la población española es entre dos y cinco veces superior al recomendable». Cabe recordar que el sector cárnico es uno de los principales motores de la economía española. Unos meses más tarde, en 2022, el entonces ministro de Consumo, Alberto Garzón, abogó también por la reducción del consumo de carne.

La publicación de este informe con la petición de la reducción del consumo de carne provocó el enfado de las seis Organizaciones Interprofesionales que representan a cientos de miles de ganaderos, empresas, trabajadores y técnicos de toda España vinculados al sector cárnico y ganadero. Hasta el punto de que se vieron obligadas a dirigir una carta al presidente del Gobierno, expresándole su profunda inquietud ante las diversas alusiones negativas hacia la producción ganadera y el consumo de carne en nuestro país incluidas en el documento de la Estrategia España 2050 presentado por él mismo.

Además de la reducción del consumo de carne y de los desplazamientos, el Plan España 2050, que redactó entre otros, Diego Rubio, defendía reducir la compra de ropa nueva y aumentar la presión fiscal hasta el 43% del PIB en las tres próximas décadas, es decir, ocho puntos más que ahora. El Ejecutivo trató de justificar ese hachazo, según se recoge en el informe de la Oficina Nacional de Prospectiva, que entonces dirigía Rubio, vendiéndolo a los españoles como una «oportunidad» para aumentar su «satisfacción vital». Una intromisión directa en la vida y en los hogares de todos los españoles, con el objetivo de controlar cada vez más sus movimientos y acciones.

El Plan España 2050, la propuesta de futuro que guía la política de Sánchez, señala también a los nacidos entre 1950 y 1975. Los califica abiertamente de «desafío» para el mantenimiento del sistema público de pensiones. El documento apunta que una vez lleguen las cohortes más pobladas del baby boom a la edad de la jubilación, sí constituye «un desafío importante». «El nivel actual de gasto en pensiones no supone, per se, una carga desproporcionada para el sistema. El porcentaje de PIB que España dedica hoy al pago de pensiones públicas totales es similar al de la media de la UE 27 e inferior al de países de la UE-8 como Austria o Francia.